¿Sabías que el día del fallecimiento de un alma justa no es un final, sino una apertura?
En la Kabalá, ese día se llama Hilulá, que significa “celebración espiritual”, porque el alma del justo no se apaga: se eleva y brilla con más fuerza, y su Luz queda disponible para quienes deseen conectarse con ella.
Este curso es una guía completa y práctica para aprender a conectar con las almas de los grandes sabios kabalistas en el día de su partida de este mundo, y descubrir cómo esa conexión puede asistirte, guiarte y fortalecerte espiritualmente..
No se trata de veneración ni de culto, sino de asociarte con la Luz que ellos revelaron, y recibir asistencia directa desde planos elevados de consciencia.
¿Por qué es tan importante este conocimiento?
Los sabios kabalistas enseñan que el alma de un tzadik no muere, solo se libera del cuerpo.
Y ese día (el día de su partida) queda una apertura energética especial a través de la cual es posible acceder a su Luz, a su consciencia, a su fuerza espiritual.
Conectarse con esa alma no significa mirar hacia atrás. Significa mirar hacia adentro y decir:
“Estoy dispuesto a recibir lo que tú lograste revelar, para seguir construyendo desde mi lugar en este mundo.”
La Hilulá es una oportunidad para elevarse más allá del tiempo y del espacio, y para traer al presente la sabiduría eterna de quienes caminaron antes que nosotros.
Este no es un curso sobre el pasado.
Es un curso sobre el poder del presente, guiado por la sabiduría de almas que brillan más allá del tiempo.
La Kabalá nos enseña que la conexión con un tzadik no ocurre en la mente, sino en la intención.
Y cuando conectas con una intención pura, desde el deseo de crecer, el alma justa se convierte en un faro silencioso que te acompaña, que te guía y que te sostiene.
“El alma del justo no se aleja. Se queda cerca de aquellos que desean continuar su obra de Luz.”
Bienvenido a este recorrido de conexión profunda.
Que la Luz de los sabios te inspire, te fortalezca y te eleve.
¡Nos vemos en la primera clase!